.
–Maestro, ¿por qué, en ocasiones, al estar frente a algo que me hace bien, no lo distingo, y después de haberme alejado, lo añoro?
–Porque eres gilipollas.
.
–Maestro, ¿por qué, en ocasiones, al estar frente a algo que me hace bien, no lo distingo, y después de haberme alejado, lo añoro?
–Porque eres gilipollas.
3 comentarios:
Qué maestro tan poco pedagógico
:(
si, pero un gran maestro. Sintetico, claro, preciso...
Fede
Exijo mas partes de "charlas con el maestroooo"
Papu.
Publicar un comentario